Alimentos que mejoran el estado de ánimo
Las últimas investigaciones demuestran que, en el campo de la nutrición, cada vez entra más en juego el concepto de la psicología. De hecho, se ha demostrado que ambas disciplinas van unidas de la mano. Conforme avanzan estas investigaciones y se dan a conocer, va aumentando la conciencia acerca de cómo nuestras emociones afectan a cómo comemos y al contrario, en una suerte de retroalimentación constante. Y todo ello desemboca, como es obvio, en nuestra salud en general.
Emoción y Alimentación
La relación que se produce entre nuestras emociones y los alimentos que ingerimos ha despertado la curiosidad desde hace unos pocos años de gran parte de la comunidad científica ya que se han ido percatando, conforme avanzan las investigaciones, de que tanto la alimentación influye en nuestro estado de ánimo como al revés: nuestras emociones tienen una incidencia directa en aquello que comemos. Por poner un ejemplo que, probablemente, nos ha pasado a todos: cuando estamos sometidos a un periodo de gran estrés o cuando estamos aburridos solemos comer peor.
Muy unido al ejemplo anterior, existe el síndrome del "comedor nocturno", según el cual, las personas que están bajo mucha presión y estrés o en depresión suelen comer alimentos nocivos para la salud (repletos de azúcar o grasas saturadas) durante la noche. Por otro lado, y continuando la senda de la nutrición emocional, también se da el caso de que aquella persona que está atravesando por una etapa de equilibrio emocional, tendrá mucha mayor facilidad para adscribirse a una dieta y seguirla con rectitud. De esta manera, las emociones juegan un papel protagonista a la hora de ayudar a perder peso; esta fue la misma conclusión que derivó de la investigación llevada a cabo por la prestigiosa Consumer Reports National Research Center. En dicho estudio participaron 1.300 psicólogos que mostraron en sus respuestas cómo las emociones afectaban positiva o negativamente en sus pacientes a la hora de seguir una dieta restrictiva.
Efectos de la nutrición emocional en nuestro cuerpo
Si en algo podemos estar todos de acuerdo es en el hecho de que aquello que comemos tiene un efecto directo en nuestro organismo en particular y en nuestra salud en general. Esto es así debido a que los nutrientes que se encuentran en los alimentos nos aportan la energía que precisamos para vivir, al tiempo que nos abastecen de todas aquellas sustancias que nuestro cuerpo necesita para desarrollar de manera correcta sus funciones vitales.
Además de todos esos aportes esenciales, debes saber que muchos alimentos también afectan a nuestro terreno emocional, ya que contienen una serie de aminoácidos así como ciertas sustancias químicas que inciden directamente en nuestras emociones. Es el caso de la leche, por ejemplo, que contiene triptófano y que, a su vez, es un precursor de la serotonina, un neurotransmisor que está relacionado con la felicidad: si tenemos bajos los niveles de la serotonina, estaremos cerca de sufrir obsesión o depresión.
Alimentos que mejoran el estado de ánimo
Una vez que hemos sentado las bases de nuestro artículo, esto es, la relación científica que se establece entre la nutrición y las emociones, y a la inversa, a continuación os dejamos una relación de aquellos alimentos que inciden directamente a mejorar vuestro estado de ánimo. Hay muchos alimentos que pueden ayudar a combatir el mal estar y la sensación de bajo nivel anímico y a llevar una vida más feliz. ¡Toma lápiz y papel y añade estos alimentos a tu próxima lista de la compra!:
Fresa
Unas buenas fresas acompañadas de un poco de nata es un alimento ideal para sentirnos mejor anímicamente: además de tratarse de un alimento afrodisíaco, también es perfecto si estás de bajón. La explicación se encuentra en los altos contenidos de vitamina C que se encuentran presentes en las fresas. Las últimas investigaciones señalan que esta vitamina es un magnífico escudo protector para las endorfinas, unas hormonas que tienen que ver con la euforia, el placer y la sexualidad. Por otro lado, son ricas en potasio que es esencial a la hora de mantener el sistema nervioso regulado.
Plátano
Otra fruta que mejora tu estado es el plátano con su famosa textura suave y sabor dulce que, además es rico en triptófano, una sustancia precursora de la serotonina, el neurotransmisor responsable de la sensación de bienestar. También contiene potasio, magnesio y vitamina B6, que ayuda a disminuir la ansiedad y reducir la tensión muscular.
Avena
El triptófano también está presente en la avena, y aumenta la producción de serotonina. Este cereal es una excelente fuente de proteínas al tiempo que provee de una enorme cantidad de antioxidantes y vitaminas; gracias a esta combinación, la ingesta de avena repercute de manera muy positiva tanto en nuestra salud física como en la emocional. En lo que se refiere a la salud emocional debes saber que comer avena te aporta vitalidad de manera directa, mientras que actúa frente al cansancio y los bajos niveles de energía: todo esto desemboca, como es obvio, en una mejora directa del estado de ánimo.
Aguacate
El aguacate es una buena opción para mejorar el estado de ánimo y mejorar el tránsito intestinal, que cuando se encuentra dañado puede aumentar el mal humor. Los aceites de su composición ayudan a los intestinos a que funcionen correctamente.
Cereza
La cereza es otra magnífica fruta que incide directamente sobre el estado de ánimo, mejorándolo. Los niveles de ácido úrico se ven reducidos directamente por la acción beneficiosa de las cerezas; de esta manera, componen un remedio preventivo excelente contra la gota; además, contienen una gran cantidad de propiedades antiinflamatorias. Gracias a su poder antioxidante son capaces de atacar y destruir los radicales libres. En el terreno emocional, has de saber que tienen una incidencia importante y directa sobre la ansiedad, el mal humor y el estrés.
Chocolate
Sin duda, el chocolate es el más famoso cuando se trata de alimentos para mejorar el estado de ánimo. ¿Quién no se siente mejor tras comer este delicioso alimento? Sin embargo, no siempre es la mejor opción para aquellos que tienen una dieta con ciertos objetivos de adelgazamiento o para aquellos otros que son intolerantes a la lactosa; también los hay que simplemente no les gusta los dulces. Sin embargo, hay buenas noticias para esa gran mayoría que disfrutamos con el chocolate: las versiones puras de este dulce (es decir, a partir de un 85% de cacao) son muy saludables. El chocolate libera dopamina junto con otros neuroquímicos que están íntimamente relacionados con el placer como la serotonina, la feniletilamina y las endorfinas. Es por este motivo científico por el que el chocolate es un excelente alimento para mejorar el estado de ánimo así como para la relajación.
Frutos secos
Los frutos oleaginosos, especialmente las nueces, son fuentes de proteínas, minerales y grasas saludables que actúan sobre el cuerpo como un importante antioxidante y combate el estrés de la vida cotidiana. En concreto, las nueces son fuentes naturales de vitamina B, selenio y proteínas. El selenio es un mineral que, según apuntan las últimas investigaciones, podría influir de manera muy positiva sobre el estado de ánimo; incluso, desde el ámbito científico se sugiere que las dietas ricas en selenio podrían aportar en aquellos que las ingieren: mayor confianza en uno mismo, menos ansiedad, mente más clara y menos confusión.
Leche
En general, los productos lácteos son ricos es minerales (sobre todo, calcio y fósforo) y vitaminas A y B. Además, son una fuente natural de proteínas de enorme calidad, al tiempo que su gran reserva de aminoácidos se encargan de mejorar el estado de ánimo y la memoria. Más concretamente, el calcio de la leche ayuda a eliminar la tensión, además de controlar la irritabilidad. Asimismo, también regula la presión arterial y es especialmente importante para los latidos del corazón y es responsable de la contracción muscular. Su alto contenido en triptófano contribuye a relajar al organismo y a mantenerlo equilibrado.
Pescado
En el terreno de los animales marinos, los pescados, en especial los que son ricos en ácidos grasos omega-3, son opciones muy a tener en cuenta a la hora de hacer nuestra lista de la compra. Parece ser que el pescado podría ser la llave para eliminar la depresión o, al menos, calmarla, así como la ansiedad; y todo ello de manera natural. Ejemplos de este tipo de pescado sería la caballa, el salmón o la sardina.
Piña
En cuanto a la piña, debes saber que se trata de una fruta muy versátil que combina de manera ideal tanto en platos fríos o calientes y cocinados, como las pizzas. Los últimos estudios apuntan a que la piña facilita la producción de serotonina, lo que actúa directamente en la mejora del estado del ánimo, así como en la calma emocional y en el aumento de los niveles de vitalidad. También es posible que esta fruta posibilite la llegada del sueño natural y reparador.
Naranja
Rica en ácido fólico, la naranja también es rica en vitamina C. Además de ser excelente para el sistema inmunológico, esta vitamina es un antioxidante, lo que significa que es capaz de promover la renovación celular y provocar una sensación de calma emocional.
Espinacas
Las espinacas contienen vitamina B y ácido fólico y contribuyen de manera importante al buen funcionamiento del sistema nervioso; además, interfieren en la formación de serotonina, que es importante para combatir el estrés, tal y como hemos señalado en líneas precedentes. Las hojas de espinaca también contienen clorofila y ayudan en la mejora de la digestión y la desintoxicación del cuerpo.
Yema de huevo
La yema de huevo contiene colina, una proteína importante para la coordinación, el mantenimiento de la memoria y la sensación de bienestar físico. En general, los huevos aportan una gran cantidad de vitaminas, minerales y proteínas de gran calidad, lo que los eleva al mismo nivel de importancia que los productos lácteos.
Pimienta
La capsaicina presente en la pimienta actúa aumentando la temperatura corporal y como termogénico, acelerando el metabolismo. Además, eleva los niveles de endorfinas, sustancias capaces de provocar placer y bienestar.
Miel
Además de sabrosa, la miel también figura en la lista de alimentos que ayudan a mejorar el estado de ánimo, ya que, tal y como sucede con otros alimentos presentes en nuestra lista, ayuda en la producción de serotonina. Dos cucharadas soperas al día, en el postre, son suficientes.
Arroz y pasta
Los altos niveles de carbohidratos presentes en el arroz y la pasta son muy importantes para una mejor absorción de triptófano, y aseguran que el nivel de glucosa en la sangre permanezca estable. Las dietas que son muy restrictivas en hidratos de carbono pueden contribuir a cambios de humor negativos.
Soja
El magnesio presente en la soja o soya, ayuda a combatir la fatiga, aumentar los niveles de energía y prevenir los calambres musculares; además, actuan junto con el calcio como un tranquilizante natural. Para conseguir esta magnífica combinación, simplemente debes tomar un vaso de leche de soja enriquecida con calcio.
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